Coaching Nutricional: Cómo influyen tus emociones
Comer no siempre tiene que ver con el hambre física.
Muchas veces comemos por estrés, tristeza, soledad o aburrimiento, y otras veces incluso dejamos de comer cuando nos sentimos desbordados emocionalmente.
La forma en que te alimentas es un espejo de cómo te sientes por dentro.

